Primer Sommelier de Bélgica, 1998. Propietario del Bar à Vin: Le Bistrot du Sommelier en Liége y sommelier-conseil del restaurante Les 7 Fontaines d’Avenne en Saint-Hubert, Bélgica.
El secreto de este gran vino español está en su origen único. Unas variedades viníferas extraordinariamente seleccionadas, un terreno pobre en forma de amfiteatro y una larga y controlada crianza en barricas nobles, son su razón de ser. Pero la razón primordial, lo verdaderamente esencial en este vino es la familia Barbier unida y dedicada a su elaboración. Degustar el Clos Mogador es sumergirse en el corazón de una filosofia cada vez más escasa en nuestros días. Es siempre con placer que yo me sumerjo en las montañas de Priorato para compartir momentos de felicidad y degustar sus maravillas. Su color es casi negro, con reflejos malvas. Un profundo aroma de frutos negros: cassis, moras y arándanos se abre desde el inicio. Llegan después notas torrefactas: café y cacao, seguidas de notas especiadas: pimienta, timo y laurel. En boca es amplio y rico, y nos recuerda las mismas notas aromáticas antes descritas. La materia es importante, siendo sin embargo accesible en el presente. Los taninos robustos y estructurados le prometen una larga vida. Su persistencia es infinita, como la cola de un pavo real y su final nos recuerda a los grandes puros de Cuba.
Lo asociaremos felizmente con la caza, en particular con la liebre, pero también con las carnes rojas: buey, cordero y avestruz. Yo preveo su apogeo en el 2005, pero ustedes pueden apreciarlo a su mejor nivel hasta el 2010.